Mañana ya es otro tema...

Buscas pan y te llevas toda una cesta. ¿Necesitas tanto?. Seguramente en ese momento, la respuesta es clara y aplastante, no. Pero ¿y mañana?. "Mañana ya es otro tema", decían aquellos ancianos que sentados viendo el viento pasar han aprendido más que cualquier joven en cursos intensivos.

Puede que esta pequeña metáfora o enajenación subliminal de lo cotidiano, nos lleve a comprender mejor determinados momentos de la vida. Pero lo primero que voy a hacer hoy antes de contaros mis vivencias va a ser darle al play para enfocar el post de manera alegre, sabiendo que hoy es jueves y el optimismo empieza a inundar mis sentidos.

Os invito a que me acompañéis en estos casi 4 minutos de tema...

Como el propio Elphomega me lavo los dientes, termino de prepararme y salgo camino de lo habitual.

Últimamente ando que no paro. Hago cosas. Desde hace ya un par de meses quise salir de mi aplastante rutina y me propuse una vida mas optimizada tanto en recursos como en tiempo. Las consecuencias directas de esto son una tarde libre a voluntad y además un ahorro de recursos que tan caros están en estos días.

De esta forma cada día puede ser completamente distinto al anterior. Ya sabéis, "hoy avión, mañana Ave, pasado quién sabe..."

Dentro de estás nuevas tendencias, he decidido romper más aún ciertas barreras en el concepto de libertad. Como muchos ya sabéis, soy de esas personas que no llevan reloj... Habrá gente que desconfié de aquellos que carecen de interés por sentirse atados a una pequeña maquina repleta de engranajes metículosamente enlazados a sus muñecas, pero eso solo son apariencias, y las apariencias engañan.

Así de claro. No necesito mirar la hora para saber en que momento me encuentro del día. Pues así era hasta ahora. En estos momentos he decidido olvidarme de los días enteros.

Parece que los lunes están prefijados a ser lentos, pesados, pesimistas y llenos de acritud, lejana a la potencial realidad. Los martes, para mi los peores días, también caminan de la mano con ese tufillo de interminables. Los miércoles son como para estar a la espectativa de lo que nos viene por delante, en teoría mucho mas optimista que lo vivido hasta el momento.

Y así van pasando los días prefijando unos estados de animo en nuestro interior que sugestiona nuestras acciones. Para nada estoy de acuerdo. De hecho podréis pensar que ahora si que he perdido el norte y que todo camina a la deriva, pero no es así.

Pese a todo vivo dentro de un meticuloso orden y clasifico todas las acciones para tenerlas bien amarraditas como bien dije al principio con el fin de optimizar mis recursos.

Pero no diré un no, más alto que otro por ser uno o otro día. Y mi cabeza que es más difícil aún, no sera capaz de pasarme a través de mi conciencia que no debo...

Caminamos en tiempos donde si no disfrutas todo lo que tenemos a nuestro alcance pronto perecerá y nadie te devolverá lo perdido. Por ello, ¿que mejor manera de vivir que olvidarse el día que es y aprovechar el concepto de libertad?

Momentos, así se podría titular este post.

Otra de las cosas que he decidido es seguir al "Jardinero Fiel". Tipo peculiar donde los allá. Es un claro ejemplo de persona underground, y que queréis que os diga, cada día me gusta más este tipo de gente. Inspiran, trasmiten, se esfuerzan, dan buen rollo, tienen algo que enseñar y lo hacen bien sin necesidad de ayuda de nadie. Eso es arte y no lo que la arcaica infraestructura cultural de este país califica con el mismo nombre.

Pero no solo él es importante, vivo en un movimiento en el que cada día hay mas gente sorprendente ofreciendo lo que mejor sabe hacer, sin atracar a tu cartera. La manera de agradecer es la que jamás se tuvo que perder, el aplauso, el disfrute, el compartir. Un "quid pro quo" que ayuda a magnificar lo espectacular.

Por ello jamás me cansaré de apreciar esos grandes momentos intangibles, pero además me da igual el día, ya que no cerrare puertas sea uno o otro. Lo importante es el momento.

Que raro suena todo hoy, ¿verdad? Elphomega, El Jardinero Fiel (vease como cocinero fiel...), los Emeterians antes de ayer...

Pues sí pero es la más autentica realidad. Hoy me voy a ver a Sharif. Estoy seguro que tiene mucho que ofrecer, y los 9 € que vale la entrada al local son tan solo un formalismo absurdo para todo lo que voy a ganar después de escuchar su lírica a unos pocos metros y como los sienta en ese instante.

Mañana ya es otro tema... seguro que no se acaba el mundo y que las obligaciones estarán justamente donde las dejamos, ni mas aquí, ni mas allá...

Mañana ya es otro tema...